🖤 Cosquilleo antes del cuero – Nuestra primera vez en una fiesta kinki

Lo confesamos: estamos nerviosos. Emocionados. Y con mariposas (negras) en el estómago.

Este sábado nos lanzamos a algo nuevo: será nuestra primera vez en una fiesta kinki. Y sí, eso también nos pone muchísimo.

Después de años disfrutando del mundo openminded, de cenas, clubs, encuentros y muchos descubrimientos, sentíamos que nos quedaba algo por explorar… y de repente apareció Kinkstars, la fiesta organizada por @Fetishelite en el club Only Crazy Dreams.

¿La excusa perfecta? Sin duda. ¿Un paso más en nuestra aventura? También.

Ganas de todo, miedo de nada

Lo primero que sentimos fue una excitación nerviosa. Porque sí, salimos de nuestra zona de confort.

Pero también ganas. Muchas ganas.

De descubrir lo desconocido. De observar, aprender, tal vez atrevernos...

Y, por supuesto, de conocer a gente guay/ que comparta esta energía tan potente que se respira en el ambiente BDSM.

Lo que más nos atrae es el conjunto: el ambiente cuidado, las performances que prometen dejar huella, y ese cosquilleo de saber que todo puede pasar, pero solo si tú quieres.

Sabemos que la noche estará llena de momentos únicos.

Nos llama mucho la atención el magnetismo de artistas como @morriganbcn y @wildpony.pony, el poder escénico de Lady Blondie, o la intensidad sensual de Miss Loba.

Y cómo no mencionar la provocación queer y juguetona de las sissy maids, el universo visual tan rompedor de Adrian Exciter, o el arte descarado y provocativo de Cherry Valentine.

Vamos a ver cosas que probablemente no olvidaremos. Y eso nos encanta.

Preparativos, risas y arneses del revés

Estos días hemos estado preparando más la actitud que la escena. No llevamos
nada planeado.

Nos habría encantado llevar algo de @spicy.style_es, pero no nos ha dado tiempo. Aun así, sabemos que pronto caerá alguna de esas piezas preciosas y únicas de Jimena, que son puro fetiche y estilo.

Eso sí, no han faltado momentos de risas: hace poco nos llegó un pedido con un arnés, y nos tiramos un buen rato tratando de entender cómo se ponía. Primero lo llevábamos al revés, luego no cuadraban las tiras... hasta que lo conseguimos.

Y claro, Rubén delante del espejo, luciéndolo, fue un momentazo. Sensualidad y torpeza pueden ir de la mano, y más si hay complicidad.

Salir de la zona de confort… también es sexy

No llevamos escena preparada ni dinámica concreta, pero sí llevamos algo que vale mucho: confianza en pareja.

Nos conocemos bien, pero esta experiencia nos ha hecho revisar nuestros límites y actualizar nuestras señales, porque salir de la zona de confort también implica estar más atentos a nosotrxs mismxs.

Si alguna pareja tiene curiosidad pero aún no se atreve, les diríamos:

atreveos, pero sin prisa. Observad, respetad, sentid... y si algo os llama, vividlo.

En estos espacios, lo que impera es el respeto. Nadie te hará ni te pedirá nada que no desees. Pero es muy probable que salgas con la mente abierta… y el cuerpo vibrando.

Para nosotros, esta fiesta es una forma de ampliar experiencias y conocimientos.

Ir juntos a algo que nos da un poco de vértigo… también fortalece.

Y lo mejor: lo hacemos de la mano, con cosquilleo, curiosidad… y sí, con cierto morbo. 😏

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Con ganas de sentir, explorar y compartir,

Macarelleta 🖤

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